Estrellas Michelin
La medida de lo mejor
Cortesía Guía Michelin
Por: María fernanda Bohórquez y Felipe Castelblanco
La Guía Michelín, fundada en 1900 por los hermanos que llevan el mismo apellido, es el libro que recopila los mejores restaurantes y hoteles del mundo. Este texto clasifica anualmente a los lugares con estrellas (una, dos o tres) dependiendo de qué tanto vale la pena que el turista gaste las llantas de su carro yendo a dichos destinos.
El objetivo es ayudar a los viajeros a escoger los mejores lugares para comer u hospedarse. La primera edición salió en Francia y tuvo un tiraje de 35.000 ejemplares. En 1910 llegó a España y Portugal y desde ahí ha empezado a crecer por el mundo, aunque en América Latina solamente se incluye a Brasil. (Visite la Guía Michelín)
Según David Stewart, gerente del restaurante Café la Huerta, en la evaluación de una estrella Michelín, a los restaurante se les evalúa “la consistencia, la relación calidad-precio, el punto de cocción de los términos que piden los guías, el rango de sabores, la creatividad y de dónde vienen los productos”. A esto se le debe sumar la infraestructura y ambiente del lugar, y el servicio del personal.
Pero, ¿cómo escogen el lugar que visitan? El voz a voz de la gente es el mejor canal. Los comensales, cuya identidad es anónima, van a los sitios que están de moda en el momento, a los que son mencionados en la prensa o en algún medio de comunicación y a veces aceptan las invitaciones de los mismos restaurantes. Para poderles otorgar una estrella se realizan mínimo cuatro visitas y pueden llegar a ser más de 10. (Vea el listado de restaurantes con estrellas Michelín 2016)
Aunque la Guía no ha llegado al país, en Bogotá residen dos chefs galardonados: el dueño de Versión Original, Paco Roncero, por su restaurante la Terraza del Casino en Madrid, y el responsable de Gamberro, Koldo Miranda, por su restaurante La Cruz de Illas en Asturias.
Miranda asegura que este reconocimiento social “te ubica en el mapa y pasas a ser uno de los establecimientos más importantes en la gastronomía. Aún así, lo importante es que todos los días vengas, trabajes y que el cliente te defienda… eso es lo que realmente cuenta”.
Igualmente, afirma que Colombia es un mercado emergente, en el que la revolución culinaria o “el hervidero”, como él lo llama, se está viviendo ahora, pero aún queda un largo recorrido para que la Guía llegue al país. Lo anterior debido a que “la mitad de la gente no sabe qué es ni lo que significa” y a pesar de que hay un gran nivel de industria, no existe un nivel culinario desarrollado.
Nicolás de Zubiría, uno de los chefs colombianos más famosos por su aparición en el programa Master Chef, dice que sería un honor el ser calificado por la Guía Michelín debido a que repercute enormemente el ser considerado entre los mejores restaurantes. Además asegura que tener asi sea una sola estrella, indica un buen estándar de calidad y un buen ofrecimiento de oferta gastronómica.
Con la llegada de varios chefs internacionales a Colombia se hace necesario entender la Guía Michelín, afirma Michelle Morales, especialista en montaje de restaurantes. Y así no haya una medición tan prestigiosa en la comida colombiana, hay varios restaurantes que están mostrando un gran potencial en la cocina.
Natalia Aguirre, creadora de Tasty Bogotá, cuenta gastronómica de Instagram con más de 20.000 seguidores, manifiesta que es impresionante cómo la gastronomía ha crecido en la capital colombiana. “Día a día se abren nuevos restaurantes y las posibilidades para disfrutar de una excelente experiencia gastronómica son cada vez mayores… no me sorprendería que en unos años viniera un inspector a evaluar los sitios. Colombia y Perú son los próximos países que ocuparán las páginas Michelín”.